El actor malagueño adquirió el pasado mes de julio un Gulfstream G200, el mismo modelo que usa desde 2015 el jugador del Real Madrid Cristiano Ronaldo. Lo tiene aparcado en un aeropuerto cercano a su casa inglesa y le ha costado cuatro millones y medio de euros.
Tal y como asegura El País, el nuevo avión de Antonio Banderas (57) pertenecía a Telefónica, que se desprendió de él dentro de “una política general de reducción de gastos operativos”. El avión tiene una autonomía que le permite no solo volar por Europa sino también viajar a América. Dispone de ocho plazas en cabina además del personal de tripulación. Recién salido de fábrica tiene un precio de 20 millones de euros, pero el malagueño lo ha comprado por 4.5 millones, ya que tiene ocho años de antigüedad. Su mantenimiento ronda los 7,000 euros mensuales, más el precio del hangar en el que lo tenga aparcado.
No es el primer avión de Banderas. El actor también es propietario de un Learjet 60, que compró de segunda mano a la empresa textil Punto Roma y que utilizaba hasta ahora para sus continuos viajes. De momento se desconoce si ambos medios de transporte están en alquiler, una práctica muy habitual entre los propietarios de jet privados ya que les ayuda a solventar los elevados gastos de este carísimo capricho.
Parece que Banderas, que ha decidido bajar el ritmo de trabajo tras sufrir un infarto hace casi un año, está volcado en operaciones empresariales. A la compra de este nuevo avión hay que sumar la del restaurante El Pimpi, uno de sus favoritos en Málaga, que adquirió el pasado mes de diciembre.